¿La época más esperada del año por un motociclista? Sin duda, la apertura de temporada. Para algunos llega un poco antes; para otros, más tarde. Pero las últimas semanas de hibernación son el periodo en el que los preparativos suponen algo de ajetreo.
Como se sabe, el primer objeto de nuestra atención es la moto; sin embargo, después de comprobar el estado de los neumáticos, de cargar la batería y revisar los niveles de los líquidos, aún queda mucho que hacer. Sí, porque después de la moto, no podemos dejar de inspeccionar el resto del equipo.
Está muy bien limpiar y cuidar el aspecto de los monos y de las chaquetas de piel, pero no hay que olvidar que también la protección de la cabeza nos da una seguridad muy especial. El casco no es como un par de guantes o de botas. El casco es el yelmo del guerrero: lleva nuestros colores, intimida a los contrincantes en la pista y se nos puede reconocer en las rutas de montaña. Se merece todo el cuidado que podemos darle; es imprescindible darle un buen pulido antes de reanudar la marcha.
Los elementos interiores extraíbles se pueden lavar a mano o en lavadora con agua templada (máx. 35°) y jabón neutro. Se deben dejar secar al aire libre, sin exponerlos a fuentes de calor. Antes de volver a usar el casco después de limpiarlo, asegúrate de que todas las partes acolchadas estén perfectamente secas para evitar la formación de malos olores y moho.
Si los elementos interiores están muy desgastados, se pueden reemplazar por completo. Pero si no son extraíbles, puedes limpiarlos con un paño suave humedecido con jabón neutro y agua tibia, aunque utilices mucho el casco, es aconsejable sustituirlo con otro que tenga elementos interiores extraíbles.
Si lo tienes, utiliza el limpiador multiuso específico y el paño AGV. O bien, usa un paño suave humedecido con jabón neutro y agua tibia.
Usa el mismo sistema con el que has limpiado la calota. Pero en caso de mucha suciedad, no frotes el paño para no hacer rasguños profundos.
Una vez que la pantalla se haya secado, puedes aplicarle una película desprendible; el uso de este tipo de lentes no es exclusivo para la conducción en pista: también sirve en carretera para proteger la pantalla contra la proyección de partículas y para alargar su vida útil.
El casco racing de 100 % fibra de carbono utilizado por los pilotos de MotoGP™.
Si tu pantalla tiene ya un par de temporadas, empieza a pensar en una nueva. Recuerda que la seguridad también es de tipo activo: es imprescindible tener una visión perfectamente clara en todo momento. Para ello, también puedes añadir a la pantalla un nuevo Pinlock, que te servirá sobre todo en días fríos o húmedos.
El casco, a fin de cuentas, junto con la chaqueta o el mono, nos distingue y nos hace reconocibles. El cuidado prolonga su vida útil y conserva su perfecta eficiencia con el paso del tiempo. Para muchos puede ser un pasatiempo agradable, antes de una salida a la pista o un paseo en compañía; no necesitas excusas para que vuelva a resplandecer.
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