Toprak Razgatlıoğlu a primera vista es un tipo tímido y educado. Si hubiera que juzgarle por sus modales, ni siquiera se diría que es piloto. No tiene nada del típico personaje carismático y algo descarado, y, sin embargo, su currículum habla por sí solo. Campeón de Europa de Superstock 600 en 2015, con 19 años, primero en el Trofeo Independiente de Superbike en 2019 y Campeón del Mundo de la misma categoría en 2021, segundo en las dos temporadas siguientes.
Al escribir estas líneas, hacia el final de la temporada 2024, parece que su potencial ha explotado, manifestándose plenamente e incluso más que antes. Toprak Razgatlıoğlu, durante esta temporada más que nunca, se ha consolidado como un fenómeno absoluto de la Superbike actual al subirse a una moto que antes había sido criticada por ser poco competitiva y verse en poco tiempo con posibilidades de victoria.
Tras superar ese muro de reserva inicial, se nos revela como un tipo tranquilo, formal y con una cierta profundidad emotiva. Es un placer charlar con él, un auténtico entusiasta, una persona con los pies en el suelo, con una dedicación especial a su oficio y unos objetivos bien claros en la cabeza.
Toprak, ¿cuándo y cómo empezó tu afición a las motos?
Cuando era niño siempre veía a mi padre como un ejemplo, era un stuntman famoso en toda Turquía. Me compró una pequeña 50 cc, pero incluso antes de tenerla pasaba mucho tiempo en bicicleta. Con mi 50 cc me divertía mucho, era una Yamaha PW 50, una pequeña moto de motocross, y yo tenía 5 años.
¿Cuál era tu sueño de niño?
De niño no tenía ningún sueño en especial. Me lo pasaba muy bien corriendo en moto para divertirme, iba al colegio y eso también me gustaba, disfrutaba de los días y era feliz sin pensar mucho en el futuro. Al crecer, de joven, cuando ya había empezado mi carrera de piloto, empecé a soñar con llegar a ser campeón del mundo, como mi ídolo Kenan Sofuoğlu.
¿Qué significado tiene el número con el que corres?
Mi número es el 54, lo elegí como homenaje a Kenan, pero también porque es el número que en las matrículas identifica a la provincia de Sakarya, de donde procedemos ambos; él lo escogió por la misma razón. En realidad antes usaba el 7, pero cuando llegué a Superbike lo ocupaba Chaz Davies, así que tuve que elegir otro.
La figura de Kenan Sofuoğlu, cinco veces campeón del mundo de Supersport, es muy importante para ti, sabemos que es algo más que un amigo o un ejemplo al que admirar: es tu mánager personal, compañero de entrenamientos y mentor. ¿Qué es lo que más has aprendido al convertirte en piloto profesional y tener un personaje así a tu lado? ¿Y qué haces para mejorarte siempre?
Tuve la suerte, incluso antes de hacerme profesional, de entrenar mucho con Kenan, me enfrenté a menudo con él y crecí con un campeón indiscutible. Aprendí mucho de él, entre los aspectos más importantes aprendí un tipo de preparación que me ayuda a ser fuerte también y sobre todo en la última parte de la carrera, cuando quizás los demás se descuelgan. Kenan es mi mánager y un gran amigo, pero más que un amigo lo considero un hermano mayor.
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Mono de moto de piel de canguro de última generación. Ligero y de alto rendimiento, con un sistema elástico pentaxial y el revolucionario airbag D-air® Racing de triple activación.
Para mejorar, siempre sigo entrenando, soy de los que van de casa a entrenar y de entrenar a casa. Me doy poco tiempo para relajarme, por supuesto que me gusta estar con los amigos, pero durante la temporada estoy siempre muy concentrado. Para darlo todo, durante la carrera pienso mucho en lo que voy a hacer, elaboro un plan, intento sentir cómo va la moto, y, si no se comporta como yo quiero, intento comprender cómo puedo adaptar mi pilotaje para que funcione mejor.
¿Cómo te preparas antes de la carrera? No tanto desde el punto de vista físico y técnico, sino desde el punto de vista mental.
Antes de la carrera, intento no pensar demasiado en ella. Si me concentro en la carrera tiendo a acumular presión. Justo antes de cada viaje, los miembros de mi grupo y yo hablamos tranquilamente de esto y aquello, sonreímos. Sé que voy a darlo todo, pero así trato de no acumular estrés y me mantengo relajado. Me encanta mi trabajo, cuando cierro la visera me digo a mí mismo que me lo voy a pasar bien, y si me lo paso bien probablemente al final acabe ganando.
¿Cuáles son sus planes para el futuro? Tanto encima de la moto como fuera de ella.
De momento, mi objetivo es MotoGP. No sé si será en 2026 o en el 27, pero quiero llegar. Si no, me encontraré al final de mi carrera sin saber lo que habría podido hacer si hubiera aceptado aquella oferta, que supuestamente no haya aceptado. No quiero encontrarme en esa situación; prefiero lanzarme, correr un par de años, descubrir que no estoy a la altura y volver a Superbike, pero tengo que intentarlo.
Después de mi carrera con las motos me gustaría dedicarme a los coches, también me apasionan. Quizá con GTs como Valentino, pero en realidad creo que los rallies son más divertidos. Puede que no en el campeonato del mundo, ya que se necesita mucha preparación para llegar ahí, pero creo que podría divertirme mucho con un coche de rally, siempre se va de lado y además se corre sobre tierra.
Eres un piloto Dainese desde hace varios años, así que vamos a hablar de tu equipo, de lo que te pones cada vez que te montas en la moto y sales a la pista. Para Dainese, el airbag D-air® es una protección imprescindible, ¿qué opinas?
Empecé a correr sin airbag, pero cuando pude probarlo enseguida pensé que era una gran mejora y tuve inmediatamente una sensación de gran seguridad. Desde entonces he tenido unas cuantas caídas graves y el mono de Dainese con airbag siempre me ha ayudado a salvar mi integridad física. Es una protección oculta, cuando te caes con un highside o a alta velocidad no notas para nada la activación, estás demasiado metido en el impacto, pero sí lo notas a veces si te caes con un lowside, el bloqueo de la dirección, si no vas demasiado rápido.
Algunos pilotos dicen que el airbag es como un casco, una vez que te acostumbras no puedes pilotar sin él. ¿Estás de acuerdo con ellos?
El airbag es un gran invento. Es una de esas cosas a las que una vez que te acostumbras ya no la quieres dejar, yo no querría pilotar sin él, así que diría que sí. En realidad, yo lo uso todo el tiempo, así que no siento su falta, pero cuando piloto con Kenan a veces me pasa que él usa un mono viejo sin airbag, y entonces me dice que no se siente tan seguro como le gustaría. El nivel del producto en sí es francamente bueno, y si pudiera mejorar algo me gustaría que se aumentara la cobertura a algunas zonas que ahora están descubiertas, porque la idea de la protección del aire funciona.
¿Te sientes seguro cuando corres a más de trescientos por hora? ¿Alguna vez has tenido miedo?
Yo solo hago mi trabajo, divirtiéndome. Ten en cuenta que no vemos el velocímetro, pero en cualquier caso la percepción que tengo no es la de ir a trescientos por hora, tan equipado y protegido como voy, tengo la sensación de que voy relativamente lento. No creo que para muchos sea una sensación compartida, pero para mí es así. ¿El miedo? A veces pasa, somos humanos, pero en otras circunstancias, no cuando estoy en la recta a toda velocidad.
